La sociedad de valores de las antiguas Cajas Vascas (actualmente Kutxabank), se traslada desde su antigua sede en la calle Navarra, al nuevo edificio de Torre Iberdrola, en Abandoibarra. La empresa se distribuye en esta gran planta singular, en las diferentes áreas que la integran divididas mediante despachos acristalados con vidrios ahumados, discretamente tamizados con venecianas de madera y puestos operativos tipo bench, que discurren siempre perpendiculares a la fachada acristalada del rascacielos.

El centro “neurálgico” de la instalación es el cuarto de servidores, o CPD, en el que se miden todos los detalles; desde su elevada sofisticación tecnologíca hasta su cuidada estética.

Norbolsa pretende en su nueva sede ofrecer una imagen cercana, cuidada, sin estridencias y lujos innecesarios; transmitiendo a sus clientes una imagen de empresa de confianza.

Cabe destacar la recepción encarando la entrada principal de la sede, y revestida en maderas lacadas en negro y nogal.